Sectores de aplicación

Quesos

INSTALACIONES DE QUESO

El secado y curado de los productos destinados al sector lácteo son etapas muy importantes en la elaboración de productos de calidad.

SECADO
La función de la instalación de secado será mantener el control de la temperatura y la humedad relativa dentro de unos valores que permitan la correcta maduración del producto.

Controlar la formación de amoníaco y dióxido de carbono es crucial en esta fase.

Las instalaciones de secado están diseñadas para garantizar una distribución homogénea del aire a través de canales textiles o de acero inoxidable, con el fin de evitar un secado excesivo de la superficie del producto.

CURADO
El secado del queso dura de media unos 3 – 6 meses o mucho más de 6 meses.

La instalación de secado tendrá la función de mantener el control de la temperatura y la humedad relativa dentro de unos valores que permitan al producto desarrollar su aroma característico.

La distribución del aire en la sala mediante conductos permite un flujo de aire homogéneo sobre el producto, con control del caudal de aire en función de la pérdida de peso deseada.

En función del tipo de queso y de la carga de la celda, pueden preverse distintas soluciones:

  • Instalaciones con conductos circulares de tejido.
  • Instalaciones estáticas.

Los quesos suelen colocarse en estanterías o carros.

SALA DE ACONDICIONAMIENTO
Las unidades de tratamiento de aire se realizan con dispositivos técnicos fundamentales para estas salas;
Frigo Impianti se preocupa desde hace décadas de respetar los parámetros termohigrométricos en las salas de producción, elaboración y envasado y de las condiciones más adecuadas para los productos.

Ahorro de energía:

  • Entalpía: utilización de aire exterior cuando las condiciones climáticas son adecuadas para la elaboración del producto.
  • Recuperación de calor: el calor generado por el compresor no se dispersa, sino que se recupera y se utiliza en el proceso de producción, eliminando la necesidad de otras fuentes de calor.
  • Economizador: al subenfriar el líquido refrigerante, se consigue una mayor capacidad de refrigeración con la misma potencia eléctrica.
  • Modulación de las válvulas de frío y calor: para mejorar el rendimiento de la instalación en función de las necesidades reales del producto durante las distintas fases de maduración.
  • Sistema de descongelación por gas caliente: permite una mejor descongelación y más breve de la batería de refrigeración, con el consiguiente ahorro de energía.